Rímini es la ciudad principal que visitar en la Riviera Romagnola, en la región Emilia-Romaña. Con más de 15 km de playa y una serie muy eficiente de infraestructuras de recepción turística la convierten en la capital costera del Adriático. Si agregamos las discotecas y los clubes nocturnos, es fácil entender por qué Rimini es considerado un verdadero parque de diversiones donde disfrutar el verano en Italia.
Rímini es un estado de ánimo, un ritmo y una vibración que ha sido capturada en película y música durante décadas. Es un lugar donde el mar, el sol y la diversión son el pan de cada día. Pero, espera un segundo, Rímini no es solo para los amantes de la playa y los fanáticos de las fiestas. ¿Eres un buscador de arte? ¿Un amante de la historia? Rímini tiene algo especial para ti también.
Comienza tu viaje en Corso d’Augusto, la arteria principal de Rímini. Aquí encontrarás el Arco de Augusto, una maravilla arquitectónica que te recordará el pasado romano de esta ciudad. Sigue caminando y llegarás a la Piazza Tre Martiri, donde Julio César una vez pronunció un discurso histórico. ¡Casi puedes escuchar el eco de sus palabras!
La Catedral de Rímini es una parada obligada en tu viaje, en su interior, encontrarás un crucifijo de Giotto y frescos de Piero della Francesca. Después, dirígete a la Piazza Cavour, donde el bullicio de la ciudad cobra vida. Allí, puedes mezclarte con los lugareños, disfrutar de la vida nocturna y admirar los monumentos históricos.
No te olvides de la «Domus del Surgeon», un testimonio fascinante de la Rímini romana, y el Puente de Tiberio, otro vínculo con el pasado de la ciudad. Atraviesa el puente hasta Borgo San Giuliano, el corazón auténtico de Rímini. Aquí, el espíritu de Fellini, un hijo de Rímini que puso a la ciudad en el mapa como nunca antes, está vivo y bien. Descubrirás que Rímini es mucho más de lo que podrías haber imaginado. Así que prepara tu maleta, ¡Rímini está esperando ser descubierta!
Aquí te dejo las 15 cosas imprescindibles que tienes que hacer y ver en Rímini.
¡Vamos, la aventura te espera!
- Tabla de Contenido
- La Catedral de Rimini
- El Arco de Augusto
- La Playa de Rimini
- La Piazza Cavour
- El Puente de Tiberio
- El Museo de la Ciudad de Rimini
- Parques de diversión de Rímini
- Parque Federico Fellini
- Castel Sismondo
- El Anfiteatro Romano
- Convento de Santa Maria delle Grazie
- El Faro de Rimini (Faro di Rimini)
- Pueblos y ciudades cercanas que visitar
- Itinerario que ver en Rímini en un día
- Donde dormir en Rímini
Rímini es un destino turístico no solo por la vida en la playa, sino como una ciudad de arte y cultura, en este post veremos las principales atracciones turísticas que ver en Rímini.
1.- La Catedral de Rimini
La Catedral de Rímini, conocida con el nombre «El Templo Malatestiano», es una iglesia, consagrada a Santa Colomba. El nombre de «Templo» proviene de su estilo arquitectónico de corte clásico, mientras que «Malatesta» se debe a que fue comisionado por Sigismondo Pandolfo Malatesta, quien gobernó Rimini desde 1432 hasta 1462.
Para reemplazar la iglesia anterior de San Francesco, Sigismondo convocó al más renombrado arquitecto del Renacimiento: Leon Battista Alberti. Este último, inspirándose en los arcos triunfales romanos, diseñó la fachada. Para su construcción, utilizó mármoles del Arco de Augusto y dispuso la inclusión de adornos con los emblemas malatestianos en la base de piedra de Istria: el elefante, las letras «I» y «S» entrelazadas (iniciales de Segismundo e Isolda, su esposa), la doble banda cuadriculada y la flor de Isolt.
Antes de adentrarte en su interior, asegúrate de visitar el lateral derecho, donde encontrarás siete arcos que resguardan los sarcófagos de los miembros más destacados de la corte de Segismundo. En contraposición, el interior de la iglesia mantiene un estilo gótico con una sola nave y seis capillas laterales.
Es imprescindible que te detengas a apreciar «La Capilla de los Planetas», que contiene la representación más antigua de Rimini, y «La Capilla de los Ancestros», donde encontrarás «El Arca de los Ancestros y Descendientes», obra esculpida por Agostino di Duccio. En esta última se conservan los restos de los predecesores malatestianos.
Las obras de arte más destacadas de la Catedral incluyen el crucifijo de Giotto, datado en 1312, y un fresco de Piero della Francesca, que retrata a Sigismondo arrodillado ante San Sigismondo.
2.- El Arco de Augusto
La Piazza dei Tre Martiri (en español, la Plaza de los 3 Mártires), es el lugar donde se encontraba el antiguo foro romano de Rímini. Desde su fundación en el 268 a. C., ha sido el corazón político y comercial de Rimini. Una estatua de Julio César se erige como un recordatorio de que este lugar estuvo una vez dedicado a su figura. Un epitafio del año 1500 conmemora que aquí el emperador habló a sus legiones después de cruzar el Rubicón, pronunciando la célebre frase «alea iacta est».
La Plaza recuerda a tres jóvenes partidarios, que fueron horriblemente asesinados por los nazis, en el agosto del 1944 (el 16). Sus nombres era: Adelio Pagliarani, Luigi Nicolò y Mario Capelli. El sitio del ahorcamiento se señala con una placa de mármol inclinada en la plaza, a pocos pasos del pequeño templo dedicado a San Antonio de Padua. El monumento más fotografiado de la plaza es la Torre del Reloj, construida en 1547, equipada con un dial que muestra el calendario, los movimientos zodiacales y las fases lunares. Piazza Tre Martiri, junto con Piazza Cavour, constituye el núcleo de la vida de la ciudad de Rimini y es una parada obligatoria en cualquier recorrido por la ciudad.
Desde la plaza, se puede avistar el Arco de Augusto, el más antiguo que ha sobrevivido en el norte de Italia. Construido en el 27 a. C. como un portal monumental, esta estructura marcaba la entrada a la ciudad a través de la Via Flaminia. En el techo, se supone que se colocó una estatua del emperador montado a caballo o en cuadriga. Los medallones muestran a Júpiter y Apolo frente a Roma y, en el lado opuesto, a Neptuno y la diosa Roma. Un dato curioso: el arco era tan grande que no permitía la colocación de puertas. Este impresionante tamaño simbolizaba que con Augusto, Rimini no tenía nada que temer.
3.- Playa de Rimini
4.- Piazza Cavour
La Piazza Cavour, antiguamente conocida como el Segundo Foro de la Rímini romana, ha desempeñado un papel destacado desde la Edad Media. El escenario ha cambiado considerablemente, antes limitado por el mar a través de la Iglesia de S. Silvestro y abierto hacia la antigua Catedral en el monte, ahora se presenta como el núcleo monumental y urbano de la ciudad.
A un lado de la plaza, se encuentran tiendas y cafeterías, mientras que en el otro lado se alzan majestuosos edificios, considerados entre los más importantes de la ciudad: el Palacio Garampi (actual sede del Ayuntamiento), el Palacio del Arengo (una representación del Rímini medieval) y el Palacio del Podestà.
Al final de la plaza se destaca el hermoso Teatro Municipal, de estilo neoclásico, que fue inaugurado en 1857 por Giuseppe Verdi. Actualmente, este teatro, que lleva el nombre de Amintore Galli, es el principal de la ciudad.
Entre los demás atractivos que adornan la plaza, encontramos la estatua de Paulo V y la Fuente de la Piña.
5.- Puente de Tiberio
El Puente de Tiberio es una de las cosas que no puedes dejar de visitar en Rímini, considerada una maravilla de la arquitectura romana, fue iniciado en el 14 a.C. por el emperador Augusto y completado en el 21 a.C. por Tiberio, a quien debe su nombre. Durante dos milenios, este puente ha servido como punto de partida para dos rutas históricas del Imperio Romano: la Via Emilia hacia Piacenza y la Via Popilia hacia Aquileia.
Construido completamente en piedra de Istria, este puente es un testimonio excepcional de la ingeniería y la funcionalidad romanas: sus pilares poseen contrafuertes verticales diseñados para disminuir la presión del agua, y su estructura se apoya en un sistema perfectamente aislado del agua. Su durabilidad ha dado lugar a numerosas leyendas, incluyendo una que lo llama «el puente del diablo», supuestamente construido en una sola noche a cambio del alma de la primera persona que lo cruzara. Se dice que cuando Tiberio rompió el acuerdo, el diablo intentó derribarlo con una patada. Todavía se pueden ver marcas que recuerdan a las huellas de una cabra en la barandilla del puente.
Para apreciar mejor su belleza (ya que todavía está abierto al tráfico), te recomendamos que te dirijas a la «Piazza sull’acqua», un parque situado al pie de los arcos del puente. Aquí puedes pasear, relajarte y descubrir la historia del puente a través del recorrido arqueológico «Las piedras cuentan». Un lugar de encuentro entre historia y leyenda, el Puente de Tiberio es una parada obligatoria en tu viaje por Rimini.
6.- Museo de la Ciudad de Rimini
El Museo de la Ciudad de Rimini ofrece un viaje completo a través del tiempo y el arte. Instalado en un antiguo convento de los Padres Jesuitas, que en el pasado albergó el Hospital Civil, el museo aloja reliquias y obras de arte rescatadas de iglesias y edificios a lo largo de la ciudad. Las dos colecciones principales son la arqueológica y la pinacoteca, rica en obras del siglo XIV.
La exploración comienza desde el mismo jardín de entrada, donde se exhiben lápidas sepulcrales rescatadas de varias necrópolis dispersas por Rimini, y se extiende a los descubrimientos de la Domus. En contraste, la galería de arte, aunque quizás no tan famosa como las de otras ciudades italianas, alberga numerosas joyas del arte italiano.
La sección que alberga obras del siglo XIV de la escuela de Rimini es excepcionalmente rica, una influencia directa de la llegada a la ciudad del maestro Giotto en 1303. Entre las obras maestras expuestas en el museo, puedes admirar un Crucifijo de Giovanni da Rimini, el políptico con «Crucifixión y los santos Damián, Cosma, Caterina y Bárbara», y un valioso políptico de Giuliano da Rimini. La magnificencia del Juicio Final, un fresco atribuido a Giovanni da Rimini proveniente de la iglesia de San Giovanni Evangelista (S. Agostino), es inolvidable.
Las salas Malatesta albergan las obras encargadas por la poderosa familia de Rimini a grandes artistas como Giovanni Bellini, Domenico Ghirlandaio, Agostino di Duccio, Pisanello y Matteo de’ Pasti, Guido Cagnacci, Centino y Guercino. Pero no olvides la sección dedicada al artista de Rimini, René Gruau. Este famoso ilustrador de moda trabajó para las revistas más destacadas del mundo (Vogue, Marie Claire) y para las casas de moda más prestigiosas (Dior, Biagiotti, Balenciaga). Fue Gruau quien diseñó el cartel de «La dolce vita» de Fellini.
No es solo un museo, es un testimonio de cómo el pasado puede dialogar con el presente, y un recordatorio de que el arte no conoce fronteras ni límites de tiempo.
7- Parques de diversión de Rímini
Rímini y sus alrededores son conocidos por sus parques de diversiones emocionantes y llenos de diversión, que ofrecen un entretenimiento inigualable para todas las edades. Entre los más populares que les recomiendo visitar, sobre todo si viajan con niños y/o adolescentes.
• Italia in Miniatura: Situado en Viserba, una fracción de Rímini, este parque temático es una reproducción a escala de muchos de los monumentos y sitios más famosos de Italia. Es una forma divertida y educativa de explorar el patrimonio cultural de Italia, todo en un solo lugar. A los niños les encanta, es un modo rápido de visitar Italia en medio día!.
• Fiabilandia: Este parque temático, ubicado en Rímini, es perfecto para las familias con niños pequeños. Con áreas temáticas como el Castillo de los Cuentos de Hadas y el Valle de los Gnomos, Fiabilandia ofrece una gran cantidad de diversión mágica.
• Aquafan: Situado en Riccione, cerca de Rímini, Aquafan es el parque acuático más famoso de Italia. Con sus numerosas piscinas, toboganes acuáticos y espectáculos en vivo, es un lugar fantástico para refrescarse y divertirse durante los meses de verano.
• Oltremare: También en Riccione, Oltremare es un parque temático que se centra en la naturaleza y la vida marina. Ofrece espectáculos de delfines, una granja educativa y una serie de exposiciones interactivas que enseñan a los visitantes sobre la vida marina y la conservación del medio ambiente.
• Mirabilandia: Aunque está un poco más alejado, en Savio, cerca de Rávena, Mirabilandia es uno de los parques de atracciones más grandes de Italia. Cuenta con una amplia gama de emocionantes atracciones, desde montañas rusas de alta velocidad hasta áreas temáticas basadas en dibujos animados populares.
Estos parques son destinos populares tanto para los lugareños como para los turistas y ofrecen una variedad de experiencias divertidas para todos los gustos y edades.
8.- Parque Federico Fellini
Ubicado a pocos pasos de la playa de Rímini, encontrarás un encantador parque, dividido en secciones por extensas vías peatonales. La arteria principal es la vía Saint-Maur-des-Fossés, que se alinea con el viale Principe Amedeo y desemboca en una gran rotonda frente al mar. Las otras son las vías Giulietta Masina y Luci del Varietà, ambas perpendiculares a la anterior.
Una parte de este parque es el jardín del Grand Hotel de Rimini, un establecimiento emblemático y querido por los habitantes locales, que ganó fama a través del director Federico Fellini en su obra maestra, Amarcord. El parque también acoge bustos de bronce, obra del escultor Elio Morri, en honor a los «padres fundadores» del turismo de Rimini.
Rodeado por una amplia variedad de árboles, principalmente perennes como pinos piñoneros y encinas, este parque es un lugar ideal para pasear y descansar en sus frescos rincones sombreados. Sus caminos están bordeados por bordillos de hormigón y adornados con modernos bancos y papeleras.
En el centro de la vía Saint-Maur-des-Fossés, rodeada por parterres de flores y palmeras enanas, se encuentra la Fuente de los Cuatro Caballos, construida en 1928, demolida en la década de 1950 y reconstruida en 1983.
Las zonas verdes varían en su diseño y vegetación. Algunas albergan antiguos robles, pinos piñoneros y bustos de los padres fundadores del turismo de Rimini. Otras se caracterizan por sus densos setos de pittosporum, áreas de juegos y gran variedad de especies de árboles.
Este parque, creado tras la Segunda Guerra Mundial, proviene de la transformación de los jardines del Kursaal, un balneario de gran magnificencia. El majestuoso edificio neoclásico que alberga el balneario fue construido en 1870-73.
9.- Castel Sismondo
Ubicado en el corazón del casco antiguo de Rimini, encontrarás el histórico Castel Sismondo, también conocido como Rocca Malatestiana. ¡Este es sin duda uno de los destinos que no puedes dejar de visitar para sumergirte completamente en la rica historia de la ciudad! La construcción de este majestuoso castillo comenzó en 1437 por orden de Sigismondo Malatesta y se completó oficialmente en 1446. Este impresionante edificio se diseñó para cumplir un doble propósito: ser residencia y fortaleza, representando así un signo de dominio y superioridad sobre la ciudad.
Actualmente, el castillo está abierto al público y se puede explorar mediante visitas guiadas, las cuales te permitirán conocer los interiores y las múltiples salas que esconde en su interior. Además, se ha transformado en un auténtico punto de reunión para los habitantes de Rimini, ya que acoge una variedad de exposiciones temporales y un mercado que se celebra dos veces a la semana, además de numerosos eventos. Definitivamente, es un lugar para vivir y experimentar al máximo. No te pierdas la oportunidad de descubrir todos los secretos que alberga el Castel Sismondo en tu visita a Rimini.
10.- El Anfiteatro Romano
El Anfiteatro Romano de Rímini es uno de los tres majestuosos monumentos antiguos de los que puede jactarse la ciudad. Se cree que fue erigido durante el siglo II d.C., y hoy en día, solo quedan algunos rastros de lo que fue uno de los anfiteatros más grandiosos de la región.
Este anfiteatro, de forma elíptica, tenía un campo de juego que medía 76,40 x 47,40 metros y estaba compuesto por 60 arcos. Se estima que podía acoger entre diez y doce mil espectadores, sin contar a aquellos que ocupaban sus asientos en los balcones adicionales de madera.
El Anfiteatro Romano era un centro de diversión y espectáculo, donde se celebraban combates de gladiadores, enfrentamientos entre hombres y entre hombres y animales, eventos muy valorados por la sociedad romana.
La audiencia jugaba un papel decisivo en la última fase del juicio sobre el destino del gladiador derrotado. En caso de perdón, gritaban «missum» (liberado), y el veredicto era sellado con el famoso gesto del pulgar hacia abajo.
Durante el siglo III, el anfiteatro fue incorporado dentro del perímetro de las nuevas murallas de la ciudad. Fue saqueado y desmantelado durante las invasiones bárbaras, pero el daño más significativo lo provocó la última guerra mundial.
Actualmente se pueden distinguir solo algunas partes de la magnífica estructura (los muros de la arena, una de las entradas principales y algunos accesos a los balcones). No obstante, sigue siendo el único teatro que ha sobrevivido en Emilia Romagna.
La reconstrucción completa del anfiteatro se basa en representaciones gráficas elaboradas a partir de excavaciones arqueológicas realizadas desde el siglo XIX.
11.- Convento de Santa Maria delle Grazie
Situado en la pintoresca colina de Covignano, con vistas al mar, se encuentra el Santuario y Convento de los Frailes Menores, uno de los sitios más cautivadores en las proximidades de Rímini.
Al igual que muchos santuarios dedicados a la Virgen María, la historia de la devoción en este lugar se remonta a una aparición especial de la Santísima Virgen. En 1286, un pastor de nombre Rustico, al encontrarse con un tronco que parecía tener facciones humanas, intentó tallarlo en honor a la Virgen María. Al encontrarse con dificultades, dos jóvenes que pasaban le ayudaron. Al despedirse, revelaron ser ángeles enviados por la Virgen, y le indicaron a Rustico que debía llevar la estatua al puerto y ponerla en un barco. Haciendo lo que se le pidió, la embarcación se dirigió al mar por sí sola, llegando a Venecia y anclándose frente a la Iglesia de S. Marziale. Hoy en día, la estatua es venerada en esa iglesia como la «Madonna de Rimini».
Para perpetuar la memoria de esta intervención milagrosa de María, los habitantes de Rímini construyeron una capilla en el lugar, que fue reemplazada en 1391 por una iglesia, que corresponde a la actual nave derecha. Esta iglesia fue ampliada en 1400, y en 1578 se añadió la nave izquierda, dedicada a la Virgen de Gracia. La iglesia fue terminada en su forma actual en 1860. Sufrió daños significativos durante los bombardeos de 1943-1944, pero fue restaurada con algunas modificaciones en 1955.
La fachada original fue decorada con frescos en 1400. El interior también estaba completamente cubierto de frescos en el siglo XVII, pero ahora solo se conservan en la nave izquierda. Desde 1396, el santuario ha estado a cargo de los franciscanos, y en 1632 se construyó un impresionante arco triunfal en honor a los santos de esta orden. Las restauraciones recientes han permitido recuperar una hermosa serie de frescos, algunos de los cuales datan del siglo XVI.
Entre las obras de arte que alberga la iglesia se encuentran una imagen de la Anunciación de Ottaviano Nelli de Gubbio (1415) y una Crucifixión del mismo autor. También se pueden encontrar un crucifijo de madera del 1500, otro del 1700, un belén de pequeñas estatuas de terracota del 1700, un lienzo de Rodríguez y un magnífico belén pintado en lienzo por Laurentini en 1602.
Muy cerca se encuentra la Villa Alvarado, que actualmente sirve como museo dedicado a las civilizaciones no europeas y es administrado por la Municipalidad de Rimini.
12.- El Faro de Rimini
En la plaza portuaria de Largo Boscovich, se alza majestuosamente un faro blanco del siglo XVIII. Este faro, de más de 27 metros de altura y con una luz que alcanza las 15 millas náuticas, vigila el canal del puerto, que antiguamente era la desembocadura del río Marecchia antes de ser redirigido hacia el norte en 1972. El faro, considerado un emblema de la Marina, posee un mecanismo de óptica rotativa. Inaugurado en 1862, presenta una torre cuadrangular blanca asentada sobre una base troncopiramidal, y está coronado por una terraza. La responsabilidad de su mantenimiento recae en el Servicio de Señalización Marítima y de Faros, dirigido por el Comando de Zona de Faros de Venecia. Aunque el acceso al faro es usualmente limitado, este se abre al público en fechas especiales, como el Día del Mar, celebrado el 11 de abril.
El paseo marítimo del puerto, conocido como «palata», es un lugar muy querido por los habitantes de Rímini para sus caminatas. Es en este escenario donde el famoso director Federico Fellini visualizó la aparición nocturna del transatlántico Rex.
Desde los muelles, los pescadores parten en sus barcos en busca de «poveracce» (almejas) y vuelven al anochecer, seguidos por bandadas de gaviotas.
Al otro lado del puerto del canal, a la izquierda del puerto, se encuentran San Giuliano Mare y el moderno muelle Marina di Rimini.
La expansión de los malecones, que comenzó en el siglo XVIII, ha permitido que la playa se extienda aún más. Actualmente, en la punta del muelle de Levante, se encuentra la escultura «La novia del marinero», creación de Umberto Corsucci. Este monumento rinde homenaje a las mujeres que esperaban en los muelles el regreso de sus hombres del mar y a aquellos pescadores que nunca volvieron.
13.- Pueblos y ciudades cercanas que visitar
Rímini es uno de los mejores pueblos donde hacer base para disfrutar las playas y pueblos cercanos de la Emilia Romaña, es bastante fácil moverse entre ellos y disfrutar la movida nocturna. Veamos algunos de los más interesantes:
• Rávena: A aproximadamente una hora en coche hacia el oeste desde Rímini, encontrarás Rávena, famosa por sus impresionantes mosaicos bizantinos que adornan muchas de sus iglesias y monumentos (Patrimonio UNESCO). Es fácil llegar en tren desde Rímini, y una vez allí, puedes visitar la Basílica de San Vital, el Mausoleo de Gala Placidia y la Tumba de Dante Alighieri. Pueden ver más en nuestros artículos dedicados: 15 Lugares qué ver en Rávena (Ravenna), Mosaicos de Rávena (Ravenna) – Entradas, horarios, precios y ubicación, Cómo llegar a Rávena (Ravenna) en tren, coche, autobús y avión, Dónde alojarse en Rávena – Mejores zonas y hoteles.
• Pesaro: A unos 40 minutos en coche hacia el norte de Rímini, Pesaro es una animada ciudad costera conocida por su festival de ópera anual dedicado a Rossini, su hijo más famoso. Además de disfrutar de su playa, también puedes visitar el Palacio Ducal y el Museo Rossini. El tren es una opción conveniente para llegar desde Rímini. Ideal para disfrutar una tarde, con un rico aperitivo o una cena en uno de sus muchos restaurantes.
• Cattolica: A solo 20 minutos al norte de Rímini, Cattolica es conocida por su playa de arena fina y su animado paseo marítimo lleno de bares y restaurantes. Es un destino popular para las familias debido a su ambiente tranquilo y amigable. Para llegar a Cattolica desde Rímini, puedes tomar un tren o un autobús. Bastante fácil de llegar y de visitar.
• San Marino: Ubicada a solo unos 30 minutos en coche de Rímini, San Marino es una pequeña república independiente enclavada en las colinas de Emilia-Romaña. Es una de las naciones más pequeñas y antiguas del mundo. Su casco antiguo es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y ofrece vistas panorámicas increíbles desde la cima del Monte Titano. Puedes llegar a San Marino en coche o en autobús desde Rímini. Es excelente para comprar «tax free» y para disfrutar un pequeño burgo.
• Riccione: A unos 20 minutos en coche al sur de Rímini, Riccione es conocida por sus playas y su animada vida nocturna. También alberga Aquafan, uno de los parques acuáticos más grandes de Europa. Para llegar a Riccione desde Rímini, puedes tomar un tren o un autobús.
• Bellaria-Igea Marina: A solo 15 minutos en coche al norte de Rímini, esta localidad costera es famosa por sus largas playas de arena y su vibrante vida nocturna durante el verano. Es fácil llegar a Bellaria-Igea Marina desde Rímini en tren o en autobús.
Estas son solo algunas de las muchas opciones disponibles para excursiones de un día desde Rímini, y cada una de ellas ofrece una visión única de la rica historia y cultura de esta región de Italia.
14.- ¿Qué ver en Rímini en un día? Itinerario
Rímini se divide básicamente en dos partes: una es la zona de la playa y el paseo marítimo, donde se concentran la mayor parte de los hoteles y apartamentos de alquiler y los establecimientos balneares de la playa, y otra es la parte de la ciudad vieja, que se encuentra ligeramente en el interior de la costa romañola.
El centro histórico de Rímini fue en la antigüedad parte de la ciudad fortificada de época romana. La evidencia de esa época son visibles en algunos de los lugares y los símbolos de la ciudad: sobre todo el famoso Arco de Augusto, el puente Tiberio, el anfiteatro o los mosaicos de la Casa del Cirujano, también de otras épocas históricas son las paredes medievales con la Porta Galliana casi completamente subterránea, el Templo Malatesta, el Palacio Arengo y Castel Sismondo, por nombrar algunos.
A lo largo del Corso d’Augusto encontrará la Piazza Cavour, la plaza más importante de Rimini, un lugar de encuentro diurno y nocturno. La «Fontana della Pigna» es un punto de referencia gracias al atractivo de bares y restaurantes que la circundan. Al lado de la fuente se encuentra el Monumento a Pablo IV y frente al Palacio Arengo, la máxima expresión de la arquitectura civil medieval en Rimini. A su lado está el Palazzo del Podestà de la década de 1300. Junto a él se encuentra el hermoso Teatro Municipal Neoclásico, inaugurado por Giuseppe Verdi en 1857. Desde la plaza se puede acceder a la Pescheria Vecchia, uno de los lugares más característicos de Rimini: el pescado se vendía bajo los arcos y en los mostradores de mármol.
En cuanto a las vistas de la época romana, el Arco de Augusto de Rímini es considerado el arco romano más antiguo conservado en el mundo. Data del 27 a.C. y lleva el nombre del emperador que lo consagró. En este lugar simbólico fluyen dos caminos de vital importancia para el imperio: la carretera de Flaminia que conecta la ciudad de Rímini con Roma y la ruta de la Via Emilia, que conduce a Piacenza, pasando por Bolonia, Reggio Emilia, Parma, entre otras.
El puente de Tiberius (nombre completo: Ponte di Augusto y Tiberio), justo en el centro de la ciudad, fue construido entre el año 14 d. C. y en 21 AD, el período en el cual los dos emperadores se sucedieron. A pesar de su edad venerable, los cinco arcos del puente todavía son capaces de soportar el tráfico de la ciudad de Rímini. En el parapeto es posible leer algunas inscripciones originales en latín; la estructura, repetidamente renovada a lo largo de los siglos, ha salido indemne de los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
Del Anfiteatro solo hay algunos restos, visible en la actual Via Roma, la gran arena para las luchas de gladiadores fue construida en el siglo II con medidas que son todo menos modestas: los ejes de la planta elíptica medían unos 118×88 metros y los escalones podían acomodar hasta 12,000 personas. También es conocido con el nombre de Anfiteatro de Adriano y, aunque no queda mucho de su esplendor antiguo, es un testimonio excepcional de lo que fue Ariminum en la época del Imperio.
Rímini también fue una ciudad importante en la Edad Media: Castel Sismondo – o castillo de Malatesta – anteriormente un palacio de Malatesta, fortaleza construida en el siglo XV. También en este caso no nos llegó en todo su esplendor (falta una pared y el foso), pero sigue siendo uno de los símbolos más queridos de la ciudad de Rímini, así como un fondo evocador para el mercado semanal que se extiende en su entorno. El Castillo Sismondo está abierto para visitas públicas, pero también durante las frecuentes exposiciones de arte que se celebran en sus salas.
El Duomo – o Tempio Malatestiano – es una vez testimonio de la familia Malatesta, como su nombre lo sugiere. Sigismondo Pandolfo Malatesta quería intervenir en el edificio de la iglesia existente, expandiendo la estructura. El resultado es un edificio verdaderamente único a pesar de haber quedado parcialmente sin terminar; en su interior se guardan algunas piezas de valor absoluto como el «Crucifijo de Rimini» de Giotto y un fresco de Piero della Francesca.
Principales atracciones que ver y visitar en Rímini
- Arco de Augusto
- Castel Sismondo, la fortaleza de Malatesta de Rimini
- Iglesia de San Agustín
- Museo della città, Museo de la Ciudad
- Palazzo dell’Arengo
- Piazza Tre Martiri, el centro neurálgico del centro histórico de Rimini
- Puente de Tiberius
- Templo de Malatesta
- Terme di Rimini, establecimiento termal de Rímini
- Mercado de pescado viejo, el antiguo mercado de pescado
- Borgo San Giuliano, una visita al distrito de pescadores
- Parque de Diversión Italia en miniatura
- Parque de Diversión Oltremare di Riccione
- Acquario di Cattolica
- Playas y lidos de Rímini
Si tienen más tiempo a disposición en Rímini, les recomiendo visitar el burgo de San Giuliano, conocido porque el Maestro Federico Fellini nació aquí. Este antiguo barrio de clase trabajadora te robará el corazón: como salidas de una fotografía, les encantarán las callejuelas con la ropa que cuelga de las ventanas y el silencio que reina en los horarios del descanzo. Pasee por los murales que recuerdan al gran director y las escenas más famosas de sus películas, un espléndido homenaje de sus conciudadanos. Visiten la Abadía de San Giuliano, que da nombre al pueblo y que contiene una espléndida obra de Paolo Veronese.
Rímini queda a tan solo 23kms de distancia de la República de San Marino, destino favorito de muchos turistas italianos y extranjeros deseosos de descubrir sus bellezas. Se puede llegar fácilmente a San Marino en autobús desde Piazza Tripoli o desde la estación central de trenes.
15.- Donde dormir en Rímini
Rímini ofrece gran cantidad de opciones de alojamiento sobre todo durante el verano. La mayor parte de hoteles y apartamentos se encuentra a lo largo de la playa, «Viale Regina Elena», paralelas e intersecciones. Rímini queda muy cerca de Riccione y Cattolica, por lo que pueden ver opciones de alojamiento en dichas ciudades. También pueden buscar alojamiento en el centro histórico de Rímini sobre todo durante el invierno. Aquí pueden ver precios y ofertas:
HOTELES Y APARTAMENTOS EN RÍMINI
HOTELES Y APARTAMENTOS EN RICCIONE
HOTELES Y APARTAMENTO EN CATTOLICA
Como llegar a Rímini
Como llegar a Rímini en auto
Desde el norte de Italia, se puede llegar a Rímini en auto tomando la autopista A14 desde Bolonia, donde confluyen con la autopista A1 del Sole, la A21 Torino-Piacenza y la A22 del Brennero. Viniendo de Venecia, la ruta más rápida es la carretera estatal 309 «Romea», en la que se injertan las carreteras procedentes de Padua y Ferrara.
Desde el sur de Italia, además de las autopistas A1 y A14, vale la pena mencionar la carretera E45, que conecta la cercana Cesena con Roma y la autopista 16 Adriatica a través de los Apeninos.
Como llegar a Rímini en tren
Pueden llegar en tren a Rímini fácilmente ya que se encuentra en la línea ferroviaria Ancona-Bologna.
Como llegar a Rímini en avión
Los aeropuertos de Bolonia (Guglielmo Marconi), Forlì (L. Ridolfi), Rimini (Federico Fellini) y Venecia (Marco Polo) son los Aeropuertos internacionales más importantes cercanos a Rímini, que la conectan con las ciudades italianas y europeas más importantes con servicios programados y vuelos chárter. Aquí pueden ver «Lista de los Aeropuerto de la región Emilia Romaña«.
Como llegar a Rímini en barco
Si desean llegar a Rímini en barco o ferry pueden llegar al Porto Canale o utilizar los servicios de la Nuova Darsena.
Más que ver en Emilia Romaña
Si visitan Rímini, no olviden visitar otras ciudades maravillosas de la región Emilia Romaña: