El Duomo, o Catedral de Milán es sin duda alguna el monumento que más representa a la ciudad. Admirarla desde la plaza o desde las calles circundantes es una experiencia muy hermosa, pues su grandeza e imponencia, unido a sus excesivos detalles góticos la hacen una de las catedrales mas hermosas del mundo.
Pero te propongo en esta oportunidad una visita a sus terrazas: subir al techo de la Catedral, y observar de cerca sus enormes torres llenas de agujas, estatuas y decoraciones mientras se observa el panorama de la ciudad es un espectáculo que no debes perderte si visitas la ciudad.
Las Terrazas de la Catedral están abiertas todos los días de 9:00 a 21:00 y se puede subir sea por escaleras (para los más deportivos 😉 ) o en ascensor.
Para subir a pié se debe dirigir al lado izquierdo de la catedral desde el exterior, (al frente del centro comercial La Rinascente) y tiene un precio de 4,00 euros que se pagan justo a los pies de las escaleras.
En cambio, si no desea fatigarse tanto, puede utilizar el ascensor, que se encuentra al lado opuesto de las escaleras: en el ala derecha de la catedral desde el exterior, y al precio de 6,00 euros en menos de 1 minuto podrá disfrutar de los panoramas de la Ciudad justo desde lo alto de su corazón: su Catedral.
Una experiencia que no puede perderse si visita Milán!